miércoles, 16 de julio de 2014

Tres letras bastan, ¡coño!

 

Boda de Juan Carlos futuro rey de España. 1962

Alfonso de Borbón y Dampierre, su primo, está en la carrera de la sucesión: a ver si Franco se atreve, ¿Para qué si no Alfonso se casa con la nietísima del dictador en 1971?

Se le pregunta al padre del futuro monarca, don Juan, qué tratamiento se debe dar a don Alfonso en el acta matrimonial y a lo largo de toda la ceremonia. Don Juan apunta que se le debería dar el tratamiento de "don". Si a los grandes de España se le daba el tratamiento de excelentísimo señor, a nuestro personaje se le debería dar, al menos, ese mismo trato. Y esto se le recorda al monarca que nunca reinó.

El padre de nuestro actual rey abdicado que odiaba a su sobrino y que, además, sabía de su interés por reinar alguna vez en España, insistió en su idea:


¡Don! ¡Coño! ¡Solo Don!

lunes, 7 de julio de 2014

Alfred censura a su propia persona, mismamente

Mr. Alfred tenía por costumbre hacer un cameo en todas sus películas, a él le gustaba y al público también puesto casi se convirtió en un entretenimiento puesto que Hitchcock realizó alguno de estos cameos de una forma harto peculiar.

Pero esta manía tuvo que ser eliminada puesto que mucho público estaba  más pendiente de descubrir dónde aparecería el afamado director y no estaba atento a lo que la película estaba desarrollando.

La solución no pasaba por eliminar esta práctica totalmente puesto que el espectador podría tirarse todo el film buscando al orondo cineasta.

La resolución del conflicto consistió en hacer estas apariciones pero muy al principio de la película y, además, de modo muy evidente para que el espectador en cuestión se dejase de sandeces y se centrara en la historia que es lo que realmente interesa (o no).




domingo, 6 de julio de 2014

Y el tabaco también entró en la guerra...,



En esta ocasión hablamos de una restricción. 

Una de las características de los Lucky Strike era su color verde militar. Con el comienzo de la Segunda Guerra Mundial: el control de los metales durante el conflicto dejó a esta empresa (y otras) sin posibilidad de adquirir uno de los componentes de básicos para obtener tinta verde.

¿Solución? Pasar a diseñar las cajetillas en blanco y sacar partido propagandístico de ello mediante una sencilla frase: Lucky Strike green has gone to the war (El verde de Lucky Strike se ha ido a la guerra).

Esto hacía que el tabaco se solidarizara con la guerra y le ayudara a convertirse en uno de los simbolos de eso que llamamos American Way of Life.


Fuente: no se pierdan este estupendo blog